Revista Perspectiva | 22 mayo 2025.

El trabajo y la vida en un planeta finito. Aproximación desde la mirada joven a los retos de la crisis ecosocial y del mundo del trabajo

    La crisis climática va a reorganizar el trabajo y esto es un dato. Lo sabemos porque nos lo dice la ciencia desde hace décadas. Sectores clave, y fuente de precariedad, especialmente para mujeres, jóvenes y migrantes, van a verse afectados radicalmente con el clima creando oportunidades, peligros y contradicciones y el sindicato deberá anticipar y ofrecer salidas deseables.

    28/09/2023. Héctor Escudero Leiva, coordinador de la Red de Activistas Jóvenes de Izquierda Unida
    El trabajo y la vida en un planeta finito. Aproximación desde la mirada joven a los retos de la crisis ecosocial y del mundo del trabajo

    El trabajo y la vida en un planeta finito. Aproximación desde la mirada joven a los retos de la crisis ecosocial y del mundo del trabajo

    El turismo ya está cambiando. Recordemos rápidamente algunos datos, antes de seguir para hacernos una idea de la dimensión que pueden suponer los cambios que voy a comentar: El turismo representa un 8 % del PIB y genera 2,27 millones de puestos de trabajo, el 11,4% del empleo total. Con el diferencial que hay entre el norte y el sur de España, no nos va a afectar a todas las regiones por igual.

    Algunas encuestas advierten de que los turistas ya piensan en la crisis climática cuando eligen destino para sus vacaciones y viajeros habituales del norte están buscando alternativas a la zona mediterránea, mientras se benefician otros destinos menos populares hasta ahora como Dinamarca, Bulgaria o Irlanda.

    Estas mismas encuestas advierten de que las temporadas turísticas se van a alargar. Además, sabemos que algunos modelos turísticos son especialmente derrochadores de agua y energía, sobre todo los que disfrutan algunas élites, como a estos que les gusta tanto jugar al golf. 

    Así que muchas cosas van a cambiar y entiéndase, no necesariamente a peor y no para todo el mundo por igual. Es perfectamente compatible un buen turismo, en términos ecológicos y energéticos, con el empleo de calidad, pero ojo, que los del golf y los jets privados no van a ceder en nada por su propia voluntad, les tendremos que hacer entrar en razón…

    "Se deberán adaptar los trabajos, ¿Cómo soportar las olas de calor en una cadena de montaje? ¿Cómo va a reaccionar la patronal ante esto? Probablemente, porque un poco nos conocemos ya a estas alturas de la partida, ellos tratarán de sostener determinados sectores en un país como el nuestro, dependiente de materias primas, reduciendo salarios para compensar el aumento de precios de materiales y suministros".

    Se deberán adaptar los trabajos, ¿Cómo soportar las olas de calor en una cadena de montaje? ¿Cómo va a reaccionar la patronal ante esto? Probablemente, porque un poco nos conocemos ya a estas alturas de la partida, que ellos tratarán de sostener determinados sectores en un país como el nuestro, dependiente de materias primas, reduciendo salarios para compensar el aumento de precios de materiales y suministros.

    Pero en cualquier caso, como decía, este artículo no es un réquiem, es un llamamiento a la acción. Tenemos oportunidades. A pesar de que la crisis climática pone en peligro la Península Ibérica por las altas temperaturas, tenemos una oportunidad, ya que en España estamos instalando renovables a buen ritmo (aunque en ocasiones a costa del mundo rural).

    Esa es la tendencia en la mayoría de comunidades autónomas en cuanto a las renovables y eso hace que tengamos un precio de energía mucho más barato que otros países, no sólo por la excepción ibérica, y por lo tanto, podamos competir, por lo menos en corto y medio plazo a nivel industrial de una forma mucho más eficiente que en otros tiempos, y puede ser una oportunidad para generar empleo de calidad en España.

    "Habrá contradicciones, hay sectores en España, como el de la automoción, que representa el 7,7% del PIB, o, dicho de otra manera, uno de cada diez personas trabajadoras del país, que colisionan frontalmente con la transición energética y el aumento de la temperatura del planeta. En el mejor de los casos se van a reducir centenares de miles de puestos de trabajo en este sector, y ante todo esto, ¿Cómo vamos a reaccionar como país? ¿Y como sindicato?"

    Habrá contradicciones, hay sectores en España, como el de la automoción, que representa el 7,7% del PIB, o, dicho de otra manera, uno de cada diez personas trabajadoras del país, que colisionan frontalmente con la transición energética y el aumento de la temperatura del planeta. En el mejor de los casos se van a reducir centenares de miles de puestos de trabajo en este sector, y ante todo esto, ¿Cómo vamos a reaccionar como país? ¿Y como sindicato?

    Más contradicciones: ¿Abrimos minas de litio en España? ¿Cerramos las de carbón? Necesitamos ambos recursos finitos para la transición ecológica y ahora mismo los estamos obteniendo a costa de los países del Sur Global, lo que nos recuerda que abordar este reto climático y energético requiere una mirada amplia, no sólo europea, sino comprendiendo la complejidad de esta crisis en el marco de un mundo multipolar ¿Qué pondremos por delante? ¿El empleo, la conservación de la naturaleza, la transición ecológica, el Sur Global…?

    Por ello, cuando hablamos de la cuestión ecológica y energética hablamos de presente. Urge asumir este marco porque las decisiones que se tomen en estos próximos años son determinantes para la calidad de vida de las generaciones que vienen detrás de nosotros, por eso, esto de la justicia climática o la defensa de la biodiversidad no es «un tema de las personas jóvenes» ¿Vamos a dejar un planeta recalentado a quienes vengan detrás? Ya lo estamos haciendo: los nacidos más recientemente van a ser víctimas de un mundo diferente al de sus antepasados, pero de los inmediatos, no estamos hablando de siglos atrás. De hecho, algunos de los que formamos parte de «la primera generación en vivir peor que la de sus padres» tampoco queremos sumarnos a este nuevo agravio, ni que lo hagan quienes vengan detrás.

    Entonces, ¿cabe imaginar una estrategia para el sindicato que saque de la ecuación la crisis climática, energética y la finitud del planeta?